Las Manta Rayas adultas son mucho más grandes, no poseen aguijón venenoso en su cola. Son animales sumamente pacíficos, que ni siquiera poseen dientes, ya que se alimentan de plancton, el cual dirigen a su enorme cavidad bucal con la ayuda de dos lóbulos cefálicos que dieron origen a su otra denominación: Raya Diablo.
Estos amistosos gigantes de las profundidades pueden llegar a medir hasta 9 mts de ala a ala, y a filtrar hasta 1000 Kg de plancton por día y como indicábamos más arriba, no poseen veneno ni dientes ya que no son cazadores, siendo su principal defensa el porte y una piel tan gruesa que ni una bala de un revólver clásico podría atravesar.
Por otro lado, la Stingray o comunmente llamada RAYA, es un pacífico animal, al cual seguramente habrán avistado cantidad de veces en sus buceos. Las mismas se encuentran en todos los océanos (y algunos ríos), en el fondo o enterradas en la arena para camuflarse. Tienen una cola que mueven como un látigo para defenderse de los depredadores que las ataquen por atrás clavando uno de sus 2 aguijones con glándulas venenosas en el cuerpo del desprevenido atacante. Si no se las molesta o pisa cuándo se encuentran bajo la arena, las rayas no sólo nunca atacarán a humanos, sino que en algunos casos pueden ser amistosas y juguetonas.